Según los cálculos de Deloitte, para el 2023 un 70% de empresas empleará el Intelligent Edge, generando un negocio de unos 12.000 millones de dólares al año. Este mercado seguirá creciendo, al menos, hasta 2025.
En los últimos meses se ha hecho evidente que la pandemia ha impulsado el crecimiento de tecnologías relacionadas con el cloud, el vídeo y lo virtual, y así lo corrobora el último estudio Predicciones TMT de Deloitte. Este documento, que analiza las tendencias que influirán en las compañías de Tecnología, Medios y Telecomunicaciones de todo el mundo durante este año y los venideros, pronostica un incremento de un 35% para el Intelligent Edge, destacándolo como un elemento clave para la cuarta revolución industrial.
¿Qué es el Intelligent Edge?
Este concepto se refiere a la capacidad de analizar datos y desarrollar soluciones en el sitio donde estos se generan. El Intelligent Edge está muy vinculado al IoT y al cloud, y su popularidad está en aumento por su alta eficiencia, ya que ahorra costes económicos y temporales al tiempo que evita vulneraciones de seguridad. Con este modelo se elimina también la dependencia de terceros, ya que se pueden ejecutar análisis completos de datos sin salir de los entornos en los que esta información se recoge. Además, el Intelligent Edge permite obtener diagnósticos en tiempo real, otorgados por herramientas con una alta adecuación al contexto y una gran capacidad de respuesta, dotando a las compañías y a los dispositivos de una gran autonomía y de una mejor capacidad de toma de decisiones.
Una herramienta que genera valor
Según los cálculos de Deloitte, para el 2023 un 70% de empresas empleará el Intelligent Edge, generando un negocio de unos 12.000 millones de dólares al año. Este mercado seguirá creciendo, al menos, hasta 2025, fecha en la que se espera que alcance un valor de 16.000 millones de dólares. Este crecimiento post pandemia se explica por el auge de las compañías de telecomunicaciones y especialmente por el crecimiento de los proveedores de servicios cloud. La crisis sanitaria ha duplicado el tráfico de internet en la nube, y se espera que esta tendencia siga al alza en los próximos 5 años, lo que hará que su tamaño crezca exponencialmente, haciendo que las empresas tengan cada vez más interés en aprovechar ese espacio para generar valor.
