Aunque todavía se están trazando las líneas de lo que supondrá su implantación generalizada, la computación cuántica ya apunta maneras. Este concepto promete un salto cualitativo para la computación tradicional y hará que ambas esferas de la informática se vuelvan mundos paralelos, al pasar del bit binario de la computación digital clásica al trabajo con qubit y mecánica cuántica; un sistema alternativo que admite la superposición coherente de unos y ceros, a diferencia del bit, que solo adopta un valor al mismo tiempo. Ciberseguridad, movilidad, procesamiento de datos o sistemas sanitarios son solo algunos de los ámbitos que la computación cuántica está llamada a revolucionar.

Más allá de una versión mejorada

Los expertos coinciden en señalar que la computación cuántica no será simplemente una versión mejorada de la informática actual, sino que nos introducirá en un paradigma totalmente innovador. El inicio de este cambio de era comienza en los años 1980, en los que físicos teóricos de la talla de David Deutsch o Richard Feynman sugieren que se apliquen los principios de la física cuántica a los entornos computacionales. El objetivo de sus precursores era que la computación cuántica superase las barreras que impone el modelo digital clásico, vigente desde su invención en 1936 por parte de Alan M. Turing. Como sospechaban sus descubridores, las computadoras cuánticas, que no se rigen por las propiedades electrónicas de los equipos actuales, podrán llevar a cabo tareas y procesos inimaginables para los modernos sistemas actuales.

La computación cuántica ya es una realidad en los mercados

La informática cuántica, con la que apenas se podía llegar a soñar hace tan sólo cuatro décadas, ya suscita un gran interés en los mercados, que se concreta, según el Boston Consulting Group, en más de 800 millones de dólares en inversiones durante 2021. En una sociedad en la que los datos son un elemento cada vez más valioso, este tipo de computación, capaz de gestionar millones de estos elementos en cuestión de segundos, generará en 2026 más de 1.765 millones de dólares, como indican las estimaciones de Markets and Markets.

¿En qué sectores será determinante?

La inédita capacidad de gestión de información de la computación cuántica hace que este nuevo sistema sea clave para la encriptación de datos sensibles, el diseño eficiente de vehículos, la creación de sistemas de detección de fraude o incluso la formulación de nuevos medicamentos y estrategias médicas. Debido a su complejidad, se descarta el uso de la informática cuántica para particulares y se restringe, de momento, al ámbito corporativo, científico y gubernamental. El amplio rango de sectores que se beneficiarán de esta nueva era cuántica es tan extenso que, en un futuro, será frecuente en áreas tan diversas como el turismo, la paquetería o la automoción.